Caleños ganan IV Campeonato Mundial de Tango en Argentina
Cultura
Caleños ganan IV Campeonato Mundial de Tango en Argentina
Redacción y Agencias - Buenos Aires, Argentina
Caleños ganan IV Campeonato Mundial de Tango en Argentina
Redacción y Agencias - Buenos Aires, Argentina
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“Ahora estoy en una
bañera en medio de pompas de jabón, en una suite del Hotel Ablasto, hablando
por teléfono y enseguida vamos a una entrevista en televisión”.
Es la voz de felicidad de Carlos Alberto Paredes Ángel, un caleño de 25 años que no se la puede creer.
Él y su pareja de baile, Diana Patricia Giraldo Rivera, de 24, ganaron el IV Campeonato Mundial de Tango, en la modalidad de Escenario, reservada sólo a bailarines profesionales por la dificultad de sus movimientos acrobáticos.
Triunfo sin precedentes: es la primera vez que extranjeros ocupan el primer lugar en el concurso de la música emblemática de Argentina y desplaza a las parejas de la cuna de la música del arrabal.
Diana Patricia tampoco cree haber despertado. Ella pasó de la tristeza infinita a la alegría desbordada cuando leyeron el fallo de los diez finalistas.
Cuando llegaron al cuarto y quinto lugar y no los nombraron a ellos, el mundo se le vino abajo. Creyó que habían quedado entre los cinco, pero no más.
“Cuando escuché decir que una pareja colombiana era la del primer lugar, yo no sabía si reír o llorar, el corazón se me subió a la garganta y creí que se me iba a salir”, dice aún emocionada.
Por su parte, su amigo y director de Tango Vivo, Edwin Chica, quien fue el productor en Argentina de la pareja ganadora, y organizador de la eliminatoria nacional en Cali, siente el triunfo como suyo.
“Es muy gratificante que sean caleños, que sean nuestros amigos y que hayan salido del concurso que Tango Vivo organizó”, dijo desde Buenos Aires.
Chica explicó el éxito de Carlos y Diana así: “Ellos trajeron una propuesta coreográfica que fusiona el tango canyengue, el más tradicional y antiguo, con elementos modernos, y eso encantó al jurado, gustó al público y fue la sensación”.
Carlos Alberto recuerda que la efusividad de las diez mil personas que asistieron a la final el domingo era impresionante.
“El público gritaba ‘Colombia, Colombia’, y en apartes tuve que bailar contando mentalmente los pasos, porque la ovación del auditorio me impedía escuchar las notas del Pájaro Azul”.
Es la voz de felicidad de Carlos Alberto Paredes Ángel, un caleño de 25 años que no se la puede creer.
Él y su pareja de baile, Diana Patricia Giraldo Rivera, de 24, ganaron el IV Campeonato Mundial de Tango, en la modalidad de Escenario, reservada sólo a bailarines profesionales por la dificultad de sus movimientos acrobáticos.
Triunfo sin precedentes: es la primera vez que extranjeros ocupan el primer lugar en el concurso de la música emblemática de Argentina y desplaza a las parejas de la cuna de la música del arrabal.
Diana Patricia tampoco cree haber despertado. Ella pasó de la tristeza infinita a la alegría desbordada cuando leyeron el fallo de los diez finalistas.
Cuando llegaron al cuarto y quinto lugar y no los nombraron a ellos, el mundo se le vino abajo. Creyó que habían quedado entre los cinco, pero no más.
“Cuando escuché decir que una pareja colombiana era la del primer lugar, yo no sabía si reír o llorar, el corazón se me subió a la garganta y creí que se me iba a salir”, dice aún emocionada.
Por su parte, su amigo y director de Tango Vivo, Edwin Chica, quien fue el productor en Argentina de la pareja ganadora, y organizador de la eliminatoria nacional en Cali, siente el triunfo como suyo.
“Es muy gratificante que sean caleños, que sean nuestros amigos y que hayan salido del concurso que Tango Vivo organizó”, dijo desde Buenos Aires.
Chica explicó el éxito de Carlos y Diana así: “Ellos trajeron una propuesta coreográfica que fusiona el tango canyengue, el más tradicional y antiguo, con elementos modernos, y eso encantó al jurado, gustó al público y fue la sensación”.
Carlos Alberto recuerda que la efusividad de las diez mil personas que asistieron a la final el domingo era impresionante.
“El público gritaba ‘Colombia, Colombia’, y en apartes tuve que bailar contando mentalmente los pasos, porque la ovación del auditorio me impedía escuchar las notas del Pájaro Azul”.
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Obra que les dio el triunfo también en Cali. Pero en Buenos Aires, al
salir al escenario, el equipo no leyó el cd.
Solucionado el problema técnico, la madre de Paredes se entusiasmaba orgullosa: "Es mi hijo, es mi hijo" y con su familia no dejaba de agitar la bandera colombiana, en las tres rondas definitivas de los 16 dúos finalistas.
Ellos rompieron la supremacía argentina –país que fue segundo y Japón, tercero– y ganaron 5.000 pesos argentinos (US$ 1.618, casi cuatro millones de pesos colombianos), un contrato de dos meses para presentarse en Japón, invitaciones a París y Brasil, y ocho días de paseo en Bariloche con todos los gastos pagos.
Este triunfo colombiano bailando de visitantes ratifica la expresión de El Clarín en su edición de ayer: Colombia es el segundo país donde más se vive la pasión por ese sentimiento triste que se baila, el tango.
En sus propias palabras
"Bailarines de Japón en pareja con argentinos, italianos sacándole viruta al piso, la intensidad y el color de los colombianos y la elegancia y sensualidad de las parejas rusas quedan como postales imborrables de once días de intensa actividad tanguera". Comité organizador del Mundial, en un comunicado oficial.
Solucionado el problema técnico, la madre de Paredes se entusiasmaba orgullosa: "Es mi hijo, es mi hijo" y con su familia no dejaba de agitar la bandera colombiana, en las tres rondas definitivas de los 16 dúos finalistas.
Ellos rompieron la supremacía argentina –país que fue segundo y Japón, tercero– y ganaron 5.000 pesos argentinos (US$ 1.618, casi cuatro millones de pesos colombianos), un contrato de dos meses para presentarse en Japón, invitaciones a París y Brasil, y ocho días de paseo en Bariloche con todos los gastos pagos.
Este triunfo colombiano bailando de visitantes ratifica la expresión de El Clarín en su edición de ayer: Colombia es el segundo país donde más se vive la pasión por ese sentimiento triste que se baila, el tango.
En sus propias palabras
"Bailarines de Japón en pareja con argentinos, italianos sacándole viruta al piso, la intensidad y el color de los colombianos y la elegancia y sensualidad de las parejas rusas quedan como postales imborrables de once días de intensa actividad tanguera". Comité organizador del Mundial, en un comunicado oficial.
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